¿Cuál es la importancia de la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial?
En nuestro país tenemos 44 personas que salen todos los días de su casa y no regresan porque murieron en un hecho vial que pudo haber sido evitado. Al día, tres niños y niñas mueren por atropellamiento, sobre todo jóvenes de 1 a 24 años; es la primera causa de muerte. Todo lo que hay alrededor de un hecho vial que no es fatal, pero que deja a personas dañadas físicamente, ahí la importancia. La ley garantiza el derecho a la movilidad, derecho que ya legislamos de manera unánime desde hace dos años con accesibilidad, inclusión, igualdad y sobre todo, seguridad Vial.
Esta ley acomoda de distintas maneras las prioridades, primero hay ocho lineamientos de tránsito que tendrán que ser respetados en todo el país; límites de velocidades, casco para las personas que manejan motocicletas, la retención de niños dentro de los vehículos y pruebas de alcoholímetro.
Nueve de cada diez hechos viales son producto de las altas velocidades a causa del alcoholismo; tenemos que lograr que las reglas de tránsito respeten lo que esta ley general nos ordena.
La jerarquía de la movilidad
El 70% de las personas se mueve en transporte público o camina, y resulta que el 70% de la inversión pública se hace para los vehículos particulares o de carga de pasajeros. Debemos proteger a los más vulnerables, que nuestros niños no mueran atropellados rumbo a la escuela o saliendo a la tienda. Esa protección se da haciendo banquetas que generen seguridad; todos tenemos un lugar en el espacio público.
Este proceso de tres años donde elaboramos los acuerdos para la ley general, hablamos con la industria automotriz. Algunos de los conceptos en la ley fueron propuestos por dicha industria. A ellos les importaba que se hiciera referencia la ley de infraestructura, les importaba que se hiciera referencia a las normas oficiales, a las autoridades competentes, en este caso, la Secretaría de Economía para el tema de vehículos seguros.
Sin embargo, llegamos al acuerdo de que eso se podría retomar, pero no remitirlo todo a las normas porque entonces la ley queda floja. La ley general es la que tiene que dar los lineamientos para que se establezcan las normas y nosotros en el senado hablamos nuestro lenguaje, debíamos tener autos y vehículos seguros a partir de los estándares internacionales.
Lo que cambió en la cámara de diputados es hacer más referencias a la norma, que ya no fuera una ley general que plantea que los autos deben seguros según los estándares internacionales.
Pienso que la industria automotriz perdió la oportunidad de dar un paso al frente para dejar de vender vehículos no seguros en nuestro país. A nosotros nos venden autos que no tienen toda la seguridad. Muchas de estás muertes vienen de personas al interior de un vehículo, se perdio la oportunidad. Ahora sí las normas oficiales serán mucho más contundentes en términos de la producción de autos nuevos.